"Music es my girlfriend" dice la canción, y yo lo tomo como un lema de vida. Para mi la música es mi más fiel compañera, mi confidente, mi amor, en fin, es la única cosa sin la que no puedo pasar un día, y así... me explico ya , ¿no?.
Bien, la cosa es que hace unos días estaba recordando mis años mozos, y eso me llevó a recordar bandas que hace rato no escucho con tanta afición. Hace unos 12 o 13 años, internet empezaba su apogeo en los hogares, los programas para download de música eran Napster,iMesh, AudioGalaxy, Emule, Kazaa... (¡oh, que tiempos!) pero aún con la maravillosa capacidad de Napster para encontrar casi todo, las conexiones eran súper lentas y si se desconectaba el usuario, adiós descarga, obtener un .mp3 era difícil y lento, se saboreaba al escucharlo, aún así la opción seguían siendo comprar cd y casetes.
En esos entonces 30 pesos era demasiado para mi bolsillo, y me esforzaba bastante en juntarlos para ir a un puesto misterioso en un lugar más misterioso a comprar mis cassetes piratas de Lacrimosa, Sins of thy beloved , Moonspell, Kittie, Deftones, Nightwish, etc. - ya sé que era más fácil en el Chopo, pero me quedaba bastante retirado- ¿por qué cassetes? porque los cds eran más caros y no me podía dar esos lujos.
Eran tiempos en los que conseguir música rock no era sencillo y mucho menos barato, donde por lo general las personas que compraban esos materiales eran personas realmente interesadas en el género o la banda. Hoy en día estamos a un click de distancia de cualquier banda y genero musical, siento que se ha perdido un poco esa magia de buscar, encontrar y disfrutar la música como hace algunos ayeres cuando inclusive comprábamos cintas vírgenes y esperábamos "esa canción" en la radio para grabarla; cuando esperábamos que alguien viajara a USA o a Inglaterra y pudiéramos encargar el cd original; cuando los cd's se juzgaban por su portada, portadilla, empaque especial o la etiqueta de Kerrang! recomendándolo.
Si, siento que actualmente la música se abarata, y no por que se descarge gratis o ilegalmente, si no por el hecho de que ya cualquiera puede ser un artista al tener miles de amigos en su FB, o por que su video tiene millones de visitas; incluso entre el público hay poco respeto por los artistas, lo que hoy está de moda, mañana ya no, y se olvida; los lanzamientos son filtrados por internet o casi semanales en la radio; en la radio pocos se esfuerzan por tener un diferencial escuchamos la misma música ; digamos pues que el factor sorpresa se ha perdido, y nos perdimos en un mundo lleno de música, música que ya no se digiere; donde la creatividad musical se prostituido.
Me llama mucho la atención , en los bares, en los antros, la emoción que muchos de nosotros sentimos cuando ponen una rola "de antaño" , de esas que marcaron y nos recuerdan otros tiempos, los llamados "clásicos . Y sí, creo que esto también es generacional, las nuevas generaciones están inmersos en este mundo de sobreimpactos, de saturación de medios e información, de descargas virtuales, en fin... el mundo de lo desechable.
En lo personal sigo siendo coleccionista de música, coleccionista de lo que para mi es uno de los lenguajes más hermosos y disfruto enormemente con cada adquisición (en cualquier formato) , hoy quiero invitarlos a desempolvar sus viniles, sus casetes y recordar lo que era escuchar el mismo disco más de 30 veces y cada vez vivirlo como si fuera la primera.
Gracias a FRANK CHURCHILl cuyo post me inspiró a terminar el mío que traía atorado.
3 Comments:
Publicar un comentario